La prueba de líquidos penetrantes es un estudio no destructivo que ayuda a determinar daños superficiales en las piezas metálicas, cerámicas o plásticos. Es un tipo de prueba no destructiva que se utiliza para detectar defectos o anomalías superficiales, con la finalidad de evitar fallas graves en el futuro.

¿Cómo se realiza esta prueba?

  1. 1. Limpieza y preparación del material

Se debe limpiar la superficie para que esté libre de cualquier contaminante, grasa, polvo o pintura. La limpieza se realiza a través de un método químico.

  2. Aplicación del líquido penetrante

Hay varios tipos de aplicación, puede ser por inmersión de la pieza, untando el líquido con una brocha o cepillo, vertiendo el líquido sobre la pieza o por pulverización. Solo se debe cubrir toda la pieza de 5 a 15 minutos.


   3. Eliminación del exceso de líquido penetrante

Debemos eliminar la capa del líquido penetrante a nivel superficial, de modo que solo se deje el líquido en las partes con anomalías.


  4. Aplicación del revelador

Necesitamos de un revelador, es decir de un polvo blanco que nos ayudará a brindar contraste entre la superficie y las anomalías.


 5. Inspección final

Realizamos una inspección final de la pieza, para descubrir las anomalías y determinar el tratamiento.